Me llamo Nataschya Barcellona, nací y me crie en Suiza y soy de origen Siciliano. Desde muy pequeña, el mundo del arte ha sido a mis ojos un lugar mágico donde poder escaparme e imaginar mi proprio mundo interior de colores y sensaciones. Completamente autodidacta en este universo de tanta riqueza estética, me apunte hace ya algunos años a una escuela de decoración. Terminados mis estudios, tuve la gran suerte de trabajar en un proyecto para crear un restaurante-panadería. Fue una experiencia maravillosa donde pude crear desde cero un espacio que reflejara el deseo de un cliente a través de mi visión. También fue un medio interesante de comunicación, como lo es a su vez pintar. Ese proyecto me permitió entender que el arte se extiende en cada rincón y en cada manera, pudiendo crear diversas estéticas.
La pandemia sin lugar a dudas fue para mí un trampolín para volver a lo que siempre fue mi pasión. Este proyecto no solo es un desarrollo de negocio, más que nada es mi proprio desarrollo personal y vital. Hoy es todo mi ser que me pide PINTAR y dedicarme a lo que más me aporta; tan sencillamente felicidad y paz.